Dos
ejemplos de grandes actuaciones de revalorización áreas degradadas que se han aprovechado
para dotar a sus respectivas ciudades de unos espacios icono de modernidad e
innovación.
El 22@
forma parte del emblemático Poblenou, dónde se han realizado una serie de
intervenciones urbanísticas destinadas a transformar éste antiguo barrio
industrial, cada vez más abandonado, en una moderna área de actividad económica
relacionada con las nuevas tecnologías.
Ésta zona
se ha concebido siguiendo otro modelo de ciudad, dentro de la trama del
ensanche de Cerdà, pero con una ocupación muy diferente, caracterizada por
edificios de gran escala y espacios urbanos también de grandes dimensiones;
dónde el uso residencial y la vida de barrio no llegan a encontrar su lugar.
El Parque
das Nações se extiende en una
franja de 5 km
a lo largo del río Tajo, con una tercera parte constituida por espacios verdes.
Fue concebido con motivo de la Expo del 98. La organización
de éste evento se convierte en una oprtunidad para recuperar una zona muy degradada,
reconvertir su uso y asegurar la integración de éste sector con la estructura
de la ciudad.
El espacio alberga grandes
equipamientos como el Pabellón Atlántico o el Oceanario de Lisboa, como edificios
emblema de la arquitectura contemporánea.
En el proyecto se llevó a cabo
una planificación urbana con la intención de crear un espacio capaz de integrar
las diversas funciones urbanas con el fin de lograr una vida equilibrada y
sostenible.