dilluns, 12 de novembre del 2012

Aperturas en la ciudad antigua


Calle típica del Vieux Lille

Lille es una ciudad con una larga historia. A pesar de que sus primeras apariciones en los archivos históricos fechan del siglo XI, se han encontrado trazas de civilizaciones en el territorio que nos llevan hasta la prehistoria. El paso del tiempo las ha ido borrando, superponiendo una etapa sobre otra; sin embargo, la Edad Media dejó una importante huella, todo un casco antiguo, como vimos también en Ciutat Vella o encontramos en muchas otras ciudades ya consolidadas en esa época. 







Etapas de la ciudad entre murallas

El casco antiguo, el Vieux Lille, posee, pues, muchos de los rasgos característicos de este tipo de tejido urbano, como Ciutat Vella. Densidad, calles estrechas y de trazado irregular, construcciones antiguas, restos históricos de todas las etapas pasadas hasta la actualidad que nos dejan leer la trayectoria que ha tenido la ciudad. El origen de la ciudad, sus calles principales, una primera fortificación, la segunda, la tercera...y llegó la Revolución Industrial con su consecuente aumento demográfico descontrolado en las ciudades. La zona fortificada es insuficiente para albergar a toda la población y las murallas dejan de ser necesarias, empieza la conquista del territorio extramuros y, más tarde, la urgencia de reorganizar la ciudad antigua, de hacerla habitable. 


En Barcelona, dicha urgencia se tradujo en ejemplos como la voluntad de dar aire al denso casco antiguo abriendo grandes calles como Ferran-Princesa o Via Laietana. En Lille se realizaron operaciones similares, aunque no fueron perforaciones en pleno casco antiguo. Lille tenía su ciudad entre murallas pero fuera de ella ya había otros asentamientos bien consolidados. Al sobrepasar dichas murallas, el crecimiento fue uniendo el centro con los asentamientos colindantes y se necesitaron nuevas líneas de organización del territorio. Dicha urgencia junto con la monumentalidad tan de moda en el siglo XIX, dieron como resultado el llamado ‘cuadrilátero’ formado por las calles Nationale, Boulevard Montebello, Boulevard Victor Hugo y Boulevard de la Liberté. Avenidas rectilíneas, anchas, arboladas, monumentales dónde las normativas de fachada son cruciales para conseguir dicha imagen. Hoy en día, este trazado sigue muy presente en la ciudad siendo aún una característica urbana importante de Lille.

El 'cuadrilátero' de Lille

Boulevard Montebello

Boulevard de la Liberté